Posiblemente algunos antitaurinos creerán que no soy una persona que ama a los animales. No es verdad. Pido respeto igual que los respeto yo a ellos.
Aquí aparece un poquito de la vida de Juan José Padilla. El dolor de su madre después de la cogida tan grave que Juan José tuvo en Zaragoza.
Ella se pregunta ¿por qué mi niño?
No, él no ha perdido la alegría de su cara. Su fuerza lleva la alegría.
Zaragoza siempre te tendrá en el recuerdo, Juan José.
Mi pequeño homenaje.
Gloria Mateo Grima